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Después de pasar dos temporadas corriendo en el Campeonato del Mundo de Moto2, Max Neukirchner ha vuelto a las parrillas del Campeonato del Mundo eni FIM Superbike en la temporada 2013. Neukirchner, que atesora dos victorias en su palmarés, corre este año con la Ducati 1199 Panigale R del equipo MR Racing y empieza a recuperar su ritmo en WSBK. Después de seis carreras de las quince que componen la temporada, el piloto alemán marcha duodécimo en el campeonato y es el hombre mejor clasificado de Ducati hasta el momento.

Max, después de volver a correr en World Superbike has tenido un positivo comienzo de temporada al puntuar en todas las salidas. ¿Te encuentras al nivel que esperabas?

"Siempre es positivo no sufrir caídas y terminar todas las carreras, pero en general no estoy del todo satisfecho con mi situación actual. Me hubiera encantado aprovechar mejor nuestro potencial, pero el apartado técnico nos está limitando un poco".

En este momento eres duodécimo en el campeonato y el piloto Ducati mejor clasificado...

"Bueno, esto ha venido por haber puntuado en cada carrera cuando los pilotos oficiales han tenido mala suerte o ni siquiera han terminado. Hemos estado trabajando constantemente para mejorar y eso sí nos hace felices. Pero, desde una perspectiva mayor de la situación, tengo sentimientos encontrados porque sé que podíamos haberlo hecho mejor. También hay apartados en los que estamos bastante descontentos. Los tres más importantes serían la falta de potencia del motor, la suspensión y la electrónica, pero espero que podamos mejorar de aquí a final de temporada. En este momento estamos entre el décimo y el décimo quinto puesto, pero nuestro objetivo es estar entre el octavo y el décimo. Creo que éste es el nivel en el que deberíamos estar a partir de ahora".

Tu estructura es el equipo privado de Mario Rubatto. ¿Qué grado de apoyo tenéis por parte de Ducati?

"Tenemos acceso a comprar todo lo que queramos. Si se desarrollan nuevas piezas y componentes, podemos adquirirlos en cuestión de dos o tres carreras como máximo. La mayor diferencia entre las motos oficiales y la nuestra está en la electrónica, ya que utilizamos un sistema completamente distinto. Tampoco pagamos los 80.000 euros de leasing por la suspensión y usamos una horquilla de 8.000 en propiedad. Considerando todo esto, creo que no estamos tan mal".

A partir de ahora llegan varios circuitos espectaculares. ¿Cuáles crees que te pueden favorecer y qué esperas de tu rendimiento de aquí a final de temporada?

"Ahora vienen cuatro circuitos que no conozco: India, Turquía, Moscú y Laguna Seca. Otros pilotos han corrido en ellos en temporadas anteriores, así que será un gran desafío para mí. Me gustan Silverstone y Jerez, por lo que espero hacerlo mejor en ellos. Tal como he dicho, si pudiera terminar entre el octavo y el décimo puesto a final de temporada con los medios que tenemos, estaría muy satisfecho. No es tan fácil como lo fue en 2007, cuando teníamos nuestro propio equipo pero la electrónica no tenía tanta importancia como ahora. Otros equipos invierten millones en ese apartado y nosotros no podemos seguirles. Pero nunca se sabe. Si en un circuito podemos hacer un fin de semana perfecto y terminar entre los cinco primeros, lo celebraríamos como una victoria".